lunes, 28 de diciembre de 2020

Criterios de evalución

Los días avanzan, la educación a distancia hace lo que puede con lo que tiene, seguimos jugando a que somos un país que no se detiene, que continúa con los planes educativos como si nada. Se asoma un panorama de más y más deserción escolar. Millones de niños se han bajado del tren y otros tantos están asomando la cabeza.

Hay un intento exhaustivo por mantener alumnos matriculados, si salen del sistema no habrá forma de taponear el manchón en las rubricas que se usan para medir la efectividad de las acciones tomadas por la Secretaría de Educación Pública.

Fracasamos, la educación en México era deficiente y de mala calidad, la pandemia llegó a remarcar sus huecos.

La SEP publicó un boletín en el cual emitió criterios de evaluación en educación básica ante emergencia sanitaria. Invita a los docentes a tomar en cuenta que la vida es complicada y que no todos los niños cuentan con las mismas oportunidades para lograr los aprendizajes. Hay infantes que no han tenido los medios para mantener comunicación con sus maestros, o que viven una situación familiar desfavorable; desgraciadamente, en este país, son millones.

Si la comunicación entre docente-alumno ha sido intermitente o inexistente, no será motivo suficiente para reprobarlos o hacer una evaluación desfavorable.

El boletín invita a dar prioridad a la función formativa de la evaluación, a considerar el contexto de cada uno de los estudiantes, a utilizar la evaluación como instrumento para mejorar el aprendizaje y a asignar calificaciones únicamente cuando haya certeza respecto a condiciones de salud, accesibilidad y acompañamiento de sus estudiantes. 

La Secretaría plantea consideraciones importantísimas que tendrían que llegar para quedarse. Dar prioridad a la función formativa de la evaluación, apunta a analizar el proceso de aprendizaje, poner marcas en el mapa que permitan al docente reorientar y recalcular caminos pedagógicos.

Es necesario recabar información para realizar los ajustes para que los estudiantes alcancen los objetivos curriculares... Se tendría que concentrar la información, analizarla y diseñar planes de acción; individuales y colectivos, locales, estatales y federal.

Los puntos que toca el boletín publicado están llenos de sentido y planteados sobre una realidad concreta, hay que cuidar que en el revés del texto no haya trampas, hay que revisarle las mangas al mago, no vaya a ser que esté escondiendo unos ases por ahí.

Las autoridades demandan que las evaluaciones se hagan con mucho cuidado, que no se repruebe a los alumnos, que se les llene de oportunidades para alentarlos a continuar sus estudios. Si nadie reprueba, la SEP tampoco. Si seguimos con los planes de estudio, si no se pierde el año escolar, podremos seguir jugando a que no pasó nada, a que vencimos a la pandemia.

Publicado en periódico IMPAR 23 de noviembre 2020. 

México.

No hay comentarios:

Publicar un comentario